Viendo el comportamiento de Alfonso, que trata a su madre como si fuera una criada, Pedro García Aguado intenta que el joven se convierta en ayuda de cámara. Alfonso se niega. "A mí me va a mantener el Estado", dice el joven que llega a asegurar que se han aprovechado de su sufrimiento. "Le tengo mucho rencor a mis padres."