Ahora compañeros en su investigación clandestina, David y Louvetot han visto de cerca al asesino. También han salvado a Aurélie Poulidor en el último momento... David, cuya novela se encontró en la última escena del crimen, empieza a preguntarse si los asesinatos están relacionados con el caso personal que le trajo a Mouthe. Pero el asesino sigue jugando con ellos, sembrando misteriosas pistas. Para entenderlas, Nicki anima a David a ahondar en su imaginación.