Flora y Aurore rompen la ley del silencio y denuncian ante Nadia Menour, la directora de la Ópera, los métodos abusivos de Diane... que es nombrada Directora de Danza. Como signo de rebeldía, Aurore va a clase con el pelo teñido de rosa fluorescente. Diane insiste en llevarse a la joven, Aurore se derrumba y le aparta la mano con violencia. Convocada al consejo disciplinario, es expulsada temporalmente. Pero muchos bailarines la apoyan y un viento de revuelta sopla en la Ópera.