Laura descubre nueva información sobre el asesino. Al mismo tiempo, la relación con su ex esposo se vuelve cada vez más tensa. Un nuevo epitafio, hallado junto al cuerpo de Lasky, predice la suerte de quien "ignoró que la desgracia atiende las veinticuatro horas". Laura creerá conocer la identidad de la próxima víctima. En un aeropuerto, Renzo, la víctima y el asesino estarán muy cerca.