En las montañas Chiricahua, al sur de Arizona, las hormigas de miel del desierto luchan ferozmente por la supervivencia y por mantener el dominio de esta pequeña porción de erial que conforma su mundo. Todo comienza durante las lluvias torrenciales en el desierto de Sonora, cuando una nueva reina surge, encuentra a un compañero y sale volando para fundar un nuevo imperio. Con el paso de las estaciones, a medida que se suceden los ataques de otras hormigas y de animales incluso más grandes, la reina y sus súbditos se hacen cada vez más fuertes. La gran prueba final, la que marca su supervivencia, se produce cuando se tropiezan con otra colonia de hormigas de la misma especie.