El reciente descubrimiento de un yacimiento en Kazajistán, puede revelar incógnitas sobre Atila y su ecléctico y violento pueblo, los Hunos. Se sabe que Atila no era un conquistador, como los romanos; él no quería poseer territorios, sino dinero y otros bienes materiales. Aceptaba gente de todos los pueblos, formando una confederación de tribus bárbaras; una de las mayores potencias militares de la historia.