Junto con su prometido, Constanza quiere hacerse cargo del negocio de su padre, granjero, y salvarlo de la bancarrota. Para ello necesitan crecer, invertir e imponerse a los grandes agricultores que tienen tierra y poder. Constanza recibe el apoyo de uno de ellos, influyente y carismático, dejando su futuro en sus manos. Cuando este impone su deseo en medio de las negociaciones, Constanza tiene que hacer frente a una nueva violencia.