En 1998 Cirque du Soleil inauguró un espectáculo permanente en Orlando, Florida, en el complejo vacacional Walt Disney World Resort. Para ello, Cirque creó su primer teatro permanente. Conceptualmente, Dragone y Laliberté decidieron recrear en La Nouba una especie de cuento de hadas, basándose en las fantásticas historias de Disney. La Nouba yuxtapone dos grupos de personajes a lo largo de su representación: uno colorido y otro monocromático.