Después de la caída del Muro de Berlín en 1989, Waters organizó un gigantesco concierto en Potsdamer Platz el 21 de julio de 1990. Se conmemoraba el fin de la división entre las dos Alemanias y la caída del infame muro que dividió a Berlín durante décadas. Al concierto asistieron más de 350.000 fans.