Irene ha incrementado la fortuna heredada de su padre gracias a su talento y falta de escrúpulos y con la ayuda de su tía Eleonora. Un día descubre que el cuarto de su madre, muerta en circunstancias misteriosas, ha permanecido intacto durante treinta años. El recuerdo materno y el encuentro con una chica imprevisible generan en Irene un conflicto que provocará un cambio sustancial en su existencia. Esta película sobre lo sagrado, los conflictos internos, oscila entre lo masculino y lo femenino, la prosperidad y la pobreza, lo material y lo espiritual.