Luego de seis años viviendo en un internado suizo, Pierre vuelve a París. Su madre, pianista, está gravemente enferma y celosamente cuidada por la familia. El padre de Pierre, un famoso director de orquesta, está visiblemente incómodo con su hijo, quien rápidamente se da cuenta de que alrededor suyo están tomando forma extrañas conspiraciones. Pierre intenta escapar entrando a la escuela de teatro, pero esto no evita que busque saldar las cuentas con su padre, a cualquier costo.