Al boxeador Bronco le retiran su licencia por estar afectado y trabaja de sacaborrachos en el cabaret El Pirulí, donde se enamora de la fichera Carmen y se hace amigo del padrote Margarito Fuensanta, El vaselinas, que perdió por apostarle y no tiene para pagar a unos gángsteres aunque se acuesta diariamente con tres de sus mujeres.