El señor Whipsnade dirige un circo de mala muerte y vive abrumado por las deudas. Además, los artistas sólo le crean problemas, y sólo puede permitirse enviar a sus hijos a un colegio pésimo. Su hija Vicky rechaza a un pretendiente fastidioso pero muy rico. Sin embargo, cuando se entera de las graves dificultades económicas de su padre cambia de idea.