Romero Kantún es un pescador retirado, que vive aislado y solitario en su modesta casa en la Isla de Tris. Don Rome vive sumido en la nostalgia, acompañado por fantasmas de la vida que no pudo tener. Alcohólico y esquizofrénico, Don Rome se las arregla para pasar los últimos días de su vida. Pero en el fondo él siente que es tiempo de recuperar aquello que le fue arrebatado décadas atrás, cuando el destino lo hizo descubrir el gran yacimiento petrolero que terminó con la pesca en la isla y le ganó el rechazo de los pescadores.