Un chico de trece años es poseído por un mal tan poderoso que ningún sacerdote es capaz de exorcizar. El chico regresa a su pueblo natal tras un nuevo intento fallido, donde se dedicará a secuestrar tanto a inocentes como a culpables para arrastrarlos hasta un castillo, donde ha descubierto una cámara de tortura, y someterlos a todo tipo de castigos.