Pablo, un chico de diecisiete años, vive en Madrid con su madre, una abogada matrimonialista de cierto éxito. En su época universitaria, en los turbulentos años setenta, fue una feminista radical y una comprometida militante de un partido de extrema izquierda. Su actitud libertaria la llevó a decidir tener a su hijo, al que nunca le habló de su padre. Sin embargo, el deseo de saber quién es su progenitor, se ha convertido para Pablo en una verdadera obsesión.