El pasado irrumpe inesperadamente en la vida del fotógrafo Bobby Garfield, cuando recibe la noticia de la muerte de un amigo de la infancia. Vuelve entonces a su ciudad natal y evoca un verano de su niñez, que pasó con Carol y Sully, sus mejores amigos, y que estuvo marcado por la llegada de Ted Brautigan, un forastero que alquiló un apartamento en la casa en la que Bobby vivía con su obsesiva madre. Ted, un hombre misterioso que fascina y perturba a Bobby, le ofrece un trabajo: leerle el periódico, pues su vista está muy debilitada, pero sobre todo ejercer un servicio de vigilancia para evitar el grave peligro que acecha a Ted.